El Bienestar desarrolla la Comunidad, y la Comunidad desarrolla el Bienestar. Construido sobre un monte Fuji que parece la cima de una colina, este es un hogar para un grupo de personas con discapacidades intelectuales, ubicado bajo un gran techo donde todos pueden reunirse fácilmente. El inversionista busca crear una nueva instalación de bienestar que esté profundamente arraigada en la comunidad local, operándola no solo como un hogar sino también como una cafetería para niños, un lugar de reunión para clubes de personas mayores y un sitio de evacuación en caso de desastres. Para ello, la arquitectura buscó una forma que promoviera conexiones con el entorno más allá de los límites del terreno.
El sitio da a una calle tranquila sin tráfico, y los aleros profundos hechos de una estructura híbrida de madera y acero integran el espacio común dentro del volumen con el entorno circundante del sitio, creando una rica extensión. La amplia entrada debajo del alero es un lugar para que los residentes se quiten los zapatos a su propio ritmo y un truco para que los locales se familiaricen espontáneamente con este lugar y esta instalación.
Desde la primavera hasta el otoño, grandes aleros canalizan el viento que sopla a través de las colinas y el aire refrescante fluye a través de las áreas comunes de techos altos. En invierno, el suelo radiante calienta suavemente las habitaciones. En contraste con el espacio común abierto, la altura de las ventanas y el piso de las habitaciones privadas se ha ajustado para que se pueda mantener la privacidad y al mismo tiempo garantizar la vista.
Una serie de ventanas de toldo como un crucero, no solo brindan una sensación de seguridad a las habitaciones privadas, sino que también son un dispositivo para los residentes que desean una vida tranquila sin entrar en pánico, incluso en caso de lluvia repentina. La casa también está equipada con un tanque de almacenamiento de agua de lluvia, una bomba manual, un generador de emergencia y una estufa de gas/eléctrica para cocinar, que puede usarse como refugio en caso de un desastre natural. Cuando se utiliza agua de lluvia para huertas, se pretende hacer el mejor uso diario de los equipos para la prevención de desastres.